Ansiedad problemas de vision
Moscas volantes por ansiedad
Más de 7 millones de estadounidenses tienen problemas de visión, de los cuales 1 millón son ciegos. Otros 93 millones de adultos estadounidenses corren el riesgo de sufrir una pérdida de visión grave. Se prevé que estas cifras aumenten debido al envejecimiento de la población y al aumento de las enfermedades crónicas.
La pérdida de visión puede afectar a su salud física al aumentar el riesgo de caídas y su calidad de vida, y también puede tener un gran impacto en su salud mental. La pérdida de visión se ha relacionado con la soledad, el aislamiento social y los sentimientos de preocupación, ansiedad y miedo.
La ansiedad no tratada puede aumentar el riesgo de desarrollar depresión. Las personas con pérdida de visión deben someterse a pruebas de detección de la depresión y la ansiedad. Cuanto antes se traten estos problemas, mejor será su calidad de vida.
Moscas volantes por ansiedad
Los investigadores han descubierto que el estrés mental puede provocar síntomas de pérdida de visión y viceversa. Interrumpir el ciclo de estrés y pérdida de visión es imprescindible para tratar los problemas de visión relacionados con el estrés.
Los efectos del estrés en la visión pueden ir desde la fatiga ocular hasta la visión doble o la distorsión visual. Los síntomas pueden aparecer de diversas maneras, como afectando sólo a un ojo, pasando de un ojo a otro, estando presentes constantemente o yendo y viniendo.
El estrés provoca problemas de visión al activar el sistema de lucha o huida del organismo y al liberar la hormona del estrés, el cortisol. Un exceso de adrenalina y cortisol puede provocar problemas oculares y cerebrales que afectan a la visión.
Todos los tipos de estrés mental pueden causar problemas de visión. El estrés crónico, así como la ansiedad y las situaciones individuales muy estresantes, pueden provocar aumentos de adrenalina y cortisol que dan lugar a problemas de visión.
Los estudios recientes que investigan la conexión entre el estrés y los problemas de visión también han identificado enfoques de tratamiento eficaces. Adoptar un enfoque psicosomático haciendo hincapié en la reducción del estrés y las técnicas de relajación es un enfoque muy eficaz para tratar la pérdida de visión relacionada con el estrés.
Problemas de visión psicosomáticos
Los trastornos de ansiedad son algunos de los problemas de salud mental más comunes en Norteamérica, y afectan a decenas de millones de personas cada año. ¿Sabía que ciertos problemas visuales pueden causar o contribuir a la ansiedad? Especialmente después de un traumatismo craneoencefálico, una condición llamada disfunción de la visión binocular puede causar ansiedad y ataques de pánico.
La visión binocular se refiere a la capacidad de ver una imagen clara y unificada, a pesar de tener dos ojos. Cuando se mira cualquier objeto, cada ojo envía su propia información visual al cerebro, y éste unifica estas imágenes sin problemas para crear la única imagen clara del mundo que nos rodea.
Con la disfunción de la visión binocular (DVB), los ojos están desalineados, por lo que el cerebro se esfuerza por crear una sola imagen con la información visual enviada por los dos ojos. Para compensar la desalineación, los músculos oculares se esfuerzan por volver a alinear los ojos. Esto suele provocar una gran tensión en los músculos oculares y causa una serie de síntomas molestos, como:
Síntomas de ansiedad por fatiga ocular
La gente suele decir que el estrés se manifiesta físicamente, y las investigaciones lo respaldan. Los factores de estrés constantes y de alta prevalencia suelen provocar problemas de salud afiliados, y los estudios han descubierto que el estrés puede causar problemas de visión y puede conducir a la pérdida de la misma. A continuación se exponen los vínculos científicos entre el estrés y la visión, y la conexión con la salud en general:
El primer vínculo con los problemas de visión relacionados con el estrés se encuentra en una poderosa hormona: el cortisol. El cuerpo lo libera gradualmente como reacción al estrés y es responsable del aumento asociado de la frecuencia cardíaca, la presión arterial, la respiración y la tensión muscular. El cortisol es tan potente que de hecho se le ha acuñado el nombre de “la hormona del estrés”, y destaca por regular temporalmente los sistemas digestivo y reproductivo del cuerpo durante los periodos de crisis.
Experimentar pensamientos ansiosos de forma cíclica conduce a un peligroso aumento de las tasas de cortisol, que interrumpe el flujo sanguíneo del ojo al cerebro, lo que puede causar problemas de visión debido al estrés. El problema podría ser tan prolongado como una degeneración macular relacionada con el estrés o tan a corto plazo como la transposición constante de palabras como resultado de un problema de aprendizaje relacionado con la visión en los niños. Dado que el estrés y las reacciones varían en cada persona, el médico puede sugerir varios tratamientos, desde la terapia de conversación hasta la terapia visual.