Debilidad y fatiga por ansiedad

Debilidad y fatiga por ansiedad

Agotamiento tras un ataque de ansiedad

Los trastornos de ansiedad y pánico pueden producir una amplia gama de síntomas físicos angustiosos. Muchas personas no son conscientes de que sus síntomas son causados por la ansiedad, lo que puede agravar el problema, ya que muchas personas se preocupan de que sus síntomas sean causados por una enfermedad subyacente, lo que conduce a una mayor ansiedad. Este círculo vicioso puede romperse aprendiendo sobre la ansiedad y siendo capaz de reconocer los síntomas físicos. Estos son los 10 síntomas físicos más comunes de la ansiedad.

La fatiga es uno de los síntomas más comunes asociados a la ansiedad, el trastorno de pánico, el estrés crónico, la depresión y otros trastornos mentales. La ansiedad crónica deja al cuerpo y a la mente en un estado constante de tensión y alto estado de alerta. La mente está constantemente escudriñando el entorno externo e interno en busca de amenazas, lo que provoca malestar emocional y tensión física. Este estado de alerta constante conduce al agotamiento mental y físico, que a menudo persiste incluso después de un largo sueño.

La ansiedad es una respuesta natural al peligro y es necesaria para que el ser humano sobreviva. Los niveles elevados de ansiedad desencadenan cambios en el cuerpo que ayudan a prepararse para hacer frente a las amenazas y al peligro, lo que también se conoce como la respuesta de lucha o huida. Sin embargo, si usted vive con ansiedad crónica, su cuerpo y su mente a menudo son incapaces de diferenciar entre los peligros reales y los imaginarios, lo que significa que la respuesta de lucha o huida puede estar continuamente activa. Uno de los primeros cambios que se producen durante la respuesta de lucha o huida es un aumento del ritmo cardíaco.

  Reflexion sobre la ansiedad

El cansancio puede provocar ataques de ansiedad

El agotamiento por ansiedad puede ser como nada que hayamos experimentado. Nuestra cabeza está nublada; nuestros pensamientos nunca terminan de completarse. Buscar una respuesta a una pregunta, o intentar recordar cómo hacer algo que hacemos a diario, como preparar una taza de té, puede ser como vadear mentalmente una melaza. Los ojos nos escuecen y tratan de cerrarse. Podemos tener un dolor de cabeza punzante. Nos duelen todos los músculos, incluso los que no sabíamos que teníamos. Nuestra respiración puede ser dificultosa y respirar profundamente puede resultar pesado y casi doloroso. Cada una de nuestras extremidades se siente como si nuestro torrente sanguíneo hubiera sido sustituido por plomo. Todo nos duele. Estar de pie, sentarse, acostarse… todo parece demasiado duro. Todo parece que nuestro cuerpo necesita más apoyo. El sonido, la luz, los olores, los sabores y las cosas que tocamos pueden parecer demasiado, casi como si nos atacaran. El mundo puede parecer borroso o peludo, sobre todo en los bordes.

A pesar de todo esto, muchos de nosotros seguiremos intentando hacer todo lo que creemos que se espera de nosotros. Puede que nos sintamos frustrados con nosotros mismos por no ser capaces de hacer las cosas al mismo nivel que seríamos capaces de lograr si no estuviéramos tan cansados. Esta frustración a menudo se ve exacerbada por nuestra incapacidad para entender por qué estamos tan cansados. A menudo sentimos que deberíamos “aguantar” y “estar mejor”.

  Farmacos para la ansiedad sin receta

La ansiedad puede provocar cansancio y mareos

La mayoría de las veces el cansancio puede deberse a uno o varios de sus hábitos o rutinas, en particular la falta de ejercicio. También suele estar relacionada con la depresión. En ocasiones, la fatiga es un síntoma de otras afecciones subyacentes que requieren tratamiento médico.Factores del estilo de vidaHacer un inventario honesto de las cosas que podrían ser responsables de su fatiga es a menudo el primer paso hacia el alivio. La fatiga puede estar relacionada con:AfeccionesEl agotamiento persistente puede ser un signo de una afección o un efecto de los fármacos o terapias utilizados para tratarla, como:

Tratamiento de la ansiedad por debilidad muscular

La ansiedad es naturalmente agotadora porque provoca altibajos en los niveles de energía, lo que puede hacer que te sientas increíblemente agotado. Algunas personas se sienten cansadas durante todo el día, mientras que otras se sienten cansadas sólo después de un ataque de ansiedad. Otras sienten una fatiga extrema, y se dan cuenta de que necesitan hacer siestas frecuentes para regenerarse o sienten que no pueden concentrarse en la vida.

La razón principal tiene que ver con el bajón que se siente después de que se agote la adrenalina. El nombre oficial de este fenómeno es fatiga suprarrenal. La ansiedad es como estar en alerta máxima. El cuerpo se prepara para luchar o huir, por lo que se inunda de energía para poder responder a una amenaza. Luego, cuando esa adrenalina sigue su curso, tu cuerpo sufre un choque que puede dejarte agotado.

  Aceite de cannabidiol para la ansiedad

Parte de ese cansancio es totalmente mental, simplemente porque el cerebro -como un músculo- puede quedarse sin fuerzas. La ansiedad está vinculada a pensamientos continuos y estresantes y a un cerebro hiperactivo. Pone a prueba tus capacidades cognitivas, lo que provoca un agotamiento de tu capacidad de pensar y reaccionar. También aumenta tu carga emocional (debido a los pensamientos angustiosos), lo que significa que acabas agotado emocional y mentalmente. Así que no es de extrañar que todos esos pensamientos hagan que tu cuerpo se canse hasta el punto de querer que descanses.

Esta web utiliza cookies propias para su correcto funcionamiento. Al hacer clic en el botón Aceptar, acepta el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos.Más información
Privacidad