Miedo al infarto por ansiedad
Trastorno de ansiedad frecuencia cardíaca
Las personas que sufren ataques de pánico suelen decir que su ansiedad aguda se siente como un ataque al corazón, ya que muchos de los síntomas pueden parecer iguales. Ambas afecciones pueden ir acompañadas de falta de aire, opresión en el pecho, sudoración, latidos fuertes del corazón, mareos e incluso debilidad física o parálisis temporal.
Es especialmente importante que conozca sus propios factores de riesgo de infarto. Por ejemplo, si usted es fumador, tiene antecedentes familiares de enfermedades cardíacas y sufre de presión arterial alta, es más probable que sufra un ataque cardíaco.
Los síntomas de ansiedad y pánico graves suelen parecerse a los de un ataque al corazón, lo que puede empeorar su angustia. Cuando la ansiedad se asemeja a un ataque al corazón, el pánico puede resultar abrumador. Por suerte, cuando los factores de estrés desaparecen, los síntomas también suelen hacerlo.
Según la American Heart Association, muchos problemas de salud mental pueden afectar a la salud del corazón. Cuando su cuerpo está bajo estrés, produce niveles más altos de glucosa, adrenalina y cortisol. La angustia repetida o prolongada sobrecarga las glándulas suprarrenales, el corazón y las arterias.
Dolor torácico no cardíaco
La cardiofobia se define como un trastorno de ansiedad de las personas caracterizado por quejas repetidas de dolor torácico, palpitaciones del corazón y otras sensaciones somáticas, acompañadas de miedo a sufrir un infarto y a morir. Las personas con cardiofobia centran la atención en su corazón cuando experimentan estrés y excitación, perciben su función de forma fóbica y siguen creyendo que sufren un problema cardíaco orgánico a pesar de las repetidas pruebas médicas negativas. Para reducir la ansiedad, buscan tranquilidad continua, hacen un uso excesivo de las instalaciones médicas y evitan las actividades que se cree que provocan los síntomas. Se discute la relación de la cardiofobia con la fobia a la enfermedad, la ansiedad por la salud y el trastorno de pánico. Se presenta un modelo psicobiológico integrador de la cardiofobia que incluye condiciones de aprendizaje previas relacionadas con experiencias de separación y enfermedad cardíaca; repertorios conductuales deficientes e inapropiados que constituyen una vulnerabilidad psicológica para los problemas cardiofóbicos; acontecimientos vitales negativos, factores de estrés y conflictos en la situación actual de la persona que desencadenan y contribuyen a los síntomas; síntomas afectivos, cognitivos y conductuales actuales y sus propiedades de estímulo; y factores de vulnerabilidad biológica genética y adquirida. Por último, se derivan del modelo recomendaciones para el tratamiento de la cardiofobia y se esbozan áreas de investigación futura.
Cardiofobia
Los estudios sugieren que aproximadamente el 11% de la población sufre un trastorno de ansiedad general en algún momento de su vida. La ansiedad puede percibirse como una sensación de malestar general pero baja, o puede aparecer y desaparecer en momentos de estrés. Para algunos, la ansiedad implica ataques de pánico, eventos que pueden imitar de cerca los síntomas de un ataque al corazón.
Dado que la ansiedad puede coincidir con la aceleración del ritmo cardíaco, latidos anormales, aturdimiento y dolor en el pecho, muchas personas se preguntan si están sufriendo ansiedad, un ataque cardíaco o si los síntomas indican un problema cardíaco subyacente. La pregunta es: ¿qué es lo primero: la ansiedad o la aceleración del ritmo cardíaco? A continuación, analizamos algunos de los indicios que pueden indicar que el corazón es la causa principal de los síntomas.
La salud cardíaca y la ansiedad están interrelacionadas. Cada una puede afectar a la otra. La mejor manera de obtener una imagen clara del ritmo y la frecuencia cardíacos es monitorizar el corazón durante un periodo de tiempo. Esto puede hacerse con un monitor cardíaco. Un monitor cardíaco es un pequeño dispositivo que registra el ritmo cardíaco de día y de noche o durante los síntomas activos. Capturando el ritmo cardíaco durante varios días o semanas, el médico puede determinar con precisión qué es lo primero, si la ansiedad o los latidos anormales.
Presión en el pecho ansiedad
Halloween es la fiesta oficial del miedo, en la que las atracciones encantadas y los maratones de películas de terror ofrecen muchos sustos. Pero aquí hay una pregunta importante de Halloween para los expertos médicos: ¿Es posible morir de miedo?
Cuando ocurre algo que da miedo, a veces oímos a la gente decir que casi le da un ataque al corazón. Así, es común pensar en la muerte por miedo como un estímulo aterrador que conduce a un evento cardíaco mortal. Sin embargo, la reacción del cuerpo al miedo es un proceso más complicado que rara vez es peligroso.
Cuando las personas experimentan un acontecimiento que les provoca emociones fuertes, el cerebro responde provocando una oleada de adrenalina, que es una hormona del estrés que hace que el corazón lata más rápido y que el cuerpo pase rápidamente al modo “lucha o huida”. La adrenalina también desencadena la transpiración y envía rápidamente la sangre a los principales grupos musculares.
En raras ocasiones, una respuesta extrema a una situación muy peligrosa o que ponga en peligro la vida puede provocar un evento cardíaco que acabe en la muerte. Estos casos suelen estar relacionados con circunstancias especiales, como la huida de un tornado u otra catástrofe natural, un asalto violento o el descubrimiento de la pérdida de un ser querido. Esos acontecimientos crean más miedo y estrés en el mundo real que los que pueden inducir las películas de terror y los sustos de Halloween.