Que hacer cuando te da ansiedad y no puedes dormir
Qué hacer si no puedes dormir
Muchas personas con trastornos de ansiedad tienen problemas para dormir y, en algún momento, es difícil saber si tienes problemas para dormir porque estás ansioso o estás ansioso porque no puedes dormir. La respuesta puede ser ambas cosas. El hecho es que el estrés y la ansiedad pueden causar problemas de sueño o empeorar los existentes. Dormir poco afecta a tu estado de ánimo y puede contribuir a la irritabilidad y, a veces, a la depresión. Durante las diferentes etapas del sueño se producen funciones cerebrales vitales que te hacen sentir descansado y con energía y que te ayudan a aprender y a crear recuerdos.
Cosas que hacer cuando no puedo dormir
Cuando la ansiedad hace que tu mente se ponga a mil por hora, puede ser difícil dejar de rumiar y relajarse al final del día. Tu mente da vueltas a la misma pista, sigue dándole vueltas a la misma conversación o se preocupa por las mismas preguntas sin respuesta. A menudo, el sueño se vuelve inalcanzable.
Por ejemplo, en el cuerpo, el estrés constante puede manifestarse como músculos tensos, problemas gastrointestinales, respiración acelerada, aumento de la frecuencia cardíaca, fatiga, rechinar o apretar los dientes, así como una plétora de otros síntomas que se ven y no se ven.
Digamos que tu cerebro está estresado y obsesionado con algo. O que las exigencias de tu vida o tu carrera te dejan constantemente preocupado. Hay una mayor probabilidad de que no esté durmiendo tan bien como podría. El resultado es la privación del sueño.
Cuando dormimos, nuestro cuerpo es capaz de sanar y procesar los eventos que suceden durante el día. Cuando estamos ansiosos, a nuestro cerebro le cuesta más desconectarse y permitir que el sueño se haga cargo, disminuyendo así la capacidad de nuestro cuerpo para curarse.
Prepararse para un buen descanso nocturno protegido del estrés y la ansiedad comienza mucho antes de llegar a la almohada. Veamos los consejos que puedes seguir durante el día que te ayudarán a descansar más fácilmente y a dormir mejor por la noche.
Ansiedad nocturna
ResumenEl insomnio es un trastorno del sueño común que puede hacer que le cueste dormirse, que le cueste mantenerse dormido o que se despierte demasiado pronto y no pueda volver a dormirse. Es posible que siga sintiéndose cansado al despertarse. El insomnio puede minar no sólo su nivel de energía y su estado de ánimo, sino también su salud, su rendimiento laboral y su calidad de vida.
En algún momento, muchos adultos experimentan un insomnio de corta duración (agudo), que dura días o semanas. Suele ser el resultado del estrés o de un acontecimiento traumático. Pero algunas personas tienen insomnio a largo plazo (crónico) que dura un mes o más. El insomnio puede ser el problema principal, o puede estar asociado a otras enfermedades o medicamentos.
Si el insomnio le dificulta el funcionamiento durante el día, acuda a su médico para identificar la causa de su problema de sueño y saber cómo puede tratarse. Si su médico cree que puede tener un trastorno del sueño, puede remitirle a un centro del sueño para que le hagan pruebas especiales.
El insomnio crónico también puede estar asociado a condiciones médicas o al uso de ciertos medicamentos. El tratamiento de la condición médica puede ayudar a mejorar el sueño, pero el insomnio puede persistir después de que la condición médica mejore.
Ataques de pánico nocturnos
Dormir bien es esencial para nuestra salud y bienestar. El sueño favorece el descanso y la relajación y nos da la oportunidad de recuperarnos y dejar atrás el estrés del día. Sin embargo, este no es el caso de muchas personas que sufren ataques de pánico por la noche.
Estos síntomas pueden ser tan graves que a veces hacen creer a quienes los padecen por primera vez que están sufriendo un ataque al corazón o un ataque de nervios. Con el tiempo, los ataques de pánico pueden volverse más frecuentes y el miedo a sufrirlos se arraiga, dando lugar a un “círculo vicioso”. También puedes experimentar lo que se conoce como sacudidas hipnóticas. Si estás especialmente estresado o ansioso, también puedes experimentar lo que se conoce como sacudidas hipnóticas. Estas sensaciones musculares involuntarias, como sacudidas, se producen cuando estás en la fase más ligera del sueño.
Los ataques de pánico nocturnos, también conocidos como “ataques de pánico nocturnos” o “terrores nocturnos”, ocurren mientras estás dormido y te despiertan, a menudo con los mismos síntomas que los ataques de pánico diurnos. Sin embargo, aunque estos ataques nocturnos suelen durar sólo unos minutos, puede pasar mucho tiempo hasta que te calmes lo suficiente como para volver a dormir después de sufrir uno. Esto, unido a la preocupación por si vas a tener otro ataque de pánico, puede provocar insomnio.